viernes, enero 07, 2005

Mente sin respuesta

En la puerta de un instituto empieza a salir gente, es la hora de ir a casa y comer.
-¿Te acerco? -me preguntó Luis. Ese cabrón sólo quería follarme, siempre se ponía en plan servicial y simpaticón. Me asqueaba.
-No, que va, ya voy sola. - Me marqué una risa fácil para no parecer molesta.- Total, ya sabes que no vivo lejos. Hasta otra.
-¡Adiós!, ¡Adiós!- Digeron unos.
-¡Yeee, nos vemoh! –Me dijo una de clase.
-¡Déu! – Respondí.

No estaba para esa clase de tonterias, mirando al suelo y con paso rápido, caminé hacia mi casa. Sabia que ahora mis padres estarían sufriendo, aún no se como les pude hacer eso. Los imaginaba amarrados al sofá, llorando ante el niño, mi hermano, de tan solo 4 años.
El olor a sangre lo presentía por toda la casa.
¿Que les paso a mi familia que algo me aseguró que nunca más me verían? Aceleré el paso, me di cuenta que lloraba, estaba llorando mucho e histéricamente. Corrí tan rápido como pude, y pensé que no vivía tan cerca, que llegaría tarde, incluso pense en Luis.

Llegué a mi portal y llamé al ascensor. Tardaba, el ascensor estaba tardando, y yo también.
Entré en el ascensor, presa de pánico, y empecé a gritar a mis padres y a mi hermano:
-¡¡Papaaaaaaaaaaaa, mamaaaaaaaaa!!, ¡Carlitoooooooos!
Salí escopeteada, busqué las llaves. Las saqué, se me cayeron. Las manos me temblaban, y la voz no era menos. Se podia decir que habitaba en mi un terremoto con epicentro cerebral.
Aún no se como les hice aquello, como se me ocurrió aquella idea de consumar tal venganza con la ayuda de Luís. Entre los dos nos propusimos....

Abrí la puerta, y al instante vomité. Daba verdadero asco ver aquello.

(Matarlos)

-¡Joder, has tardao cabrona! ¿Que coño te pasa, ehhh? - Me gritó Luis descontrolado, estaba lleno de sangre, y su mirada era odio. - ¡Acaba con ellos maldita puta, que no pillarán, han chillado mucho!
-¡Nooooooo! Que has hecho, ¡¡no quería esto!!

La imagen siguiente me marcó para todo la vida; mi hermano descuartizado en el salón y mis padres atados, emitiendo gruñidos delirantes, sin ojos y brutalmente apuñalados; con un sólo hilo de vida.

-Aaaaaaaagh!!! -Me dió una furia asesina y les aticé a ambos con un paraguas que abia a mano, hasta matarlos.
Acto seguido apuñalé a Luis en el corazón.
Una palabra salió de su boca nadando en sangre. No se si fue 'adiós' o 'dolor'.

¿Que me llevó a aquello?, ¿por qué los odiaba?, ¿cómo convencí a Luis para que me ayudara?

Nada tenia respuesta, yo quería a mis padres, simpre fueron buenos.
Me puse de cuclillas, derrotada, y seguí llorando mas y mas, mientras notaba que mi corazon no tenía cabida en mi pecho.
Me di cuenta que algo me escocía, palpé mi entrepierna. Ahora entendía lo de Luis; me había follado.

¿Y porqué no lo sabia o no me acordaba?, ¿y porqué matar a mi familia?

Estaba loca y sufría de doble personalidad y esquizofrenia, entre otros males cerebrales que ni recuerdo.

¿Llegaría el psiquiatra que necesitaba urgentemente? No lo sabia, y tampoco esperaría.

Cerré los ojos y ví a mis padres muertos en el sofá con las cuencas vacías; abrí los ojos y los volví a ver.

En acto de suicidio y compasión, me atravesé de sien a sien el cuchillo que acabó con Luis.

-¡Papás, os quiero!
-Aaaaaaagggghhhh........